domingo, 13 de enero de 2013

Café de pregoneros

En la tarde de ayer sábado tuvo lugar a iniciativa de esta bitácora un café de pregoneros que reunió a los que en este 2013 anunciarán con su palabra la Semana Santa en cada una de nuestras Hermandades. Se dieron cita en la plaza de la Catedral a primeras horas de la tarde compartiendo posteriormente una sobremesa en animada charla que se prolongó hasta casi las 21h., acudieron José Antonio Sánchez Santander que pregonará la Semana Santa de Almería en el Teatro Apolo en fecha que el propio pregonero aún no conoce, Manuel Fernández Gil y Antonio Andrés Díaz Cantón que la anunciarán en las Hermandades del Prendimiento y de la Macarena el próximo sábado día 26 de enero, Fernando Salas Pineda en la Congregación de las Angustias y Buena Muerte el 2 de marzo, Antonio Jesús Salmerón Gil que lo hará en Pasión el 9 del mismo mes y Juan José Ruiz Plaza que pronunciará su primer pregón al día siguiente en los Estudiantes. Disculpó su presencia el pregonero del Cristo del Amor, Gabriel Martín Gázquez al que le fue imposible desplazarse desde su domicilio habitual en Alcalá de Guadaira (Sevilla). Quedaron fuera de esta convocatoria los pregoneros de otras Hermandades que a día de hoy no se han hecho públicos, concretamente los de la Unidad, Gran Poder, Nazarenos y Soledad.

A modo de presentación se hizo un repaso de la trayectoria personal de cada uno en cuanto a sus vivencias pregoneras, sin duda se reconoció de entre los presentes a Manuel Fernández Gil como maestro en este género, ha dado hasta el momento el de Semana Santa y este año cumplirá el sexto en hermandades de penitencia almerienses, seguido de Antonio Jesús Salmerón Gil y Antonio Andrés Díaz Cantón con cinco y cuatro respectivamente -curiosamente estos cofrades estudiantiles de pro no lo han dado en su Hermandad-. Se habló de la necesidad del Pregón en las Cofradías, llegando a la conclusión de que este exceso absoluto y sin medida perjudica la calidad y contribuye a desangrar aún más al pregón oficial herido de muerte desde hace años, lo desangelado de público de la mayoría de ellos debe llevar al convencimiento de su supresión por parte de algunas Hermandades -ellas más que nadie saben cuales son- sin causar deshonra alguna por años que lleven celebrándolo, en este sentido se apuntó la posibilidad de modificar los espacios por recintos más cómodos y recogidos. 

La inflación de pregones, a los once habituales se han sumado esporádicamente los de las Hermandades de la Estrella y Sepulcro, va en ocasiones en detrimento de los cultos anuales, se escuchan más conciertos en estos actos que música sacra en las solemnes funciones. Al pestiño cuaresmal tendríamos que añadir los de fuera de este tiempo, como la exaltación eucarística de la Cena y la mariana de Coronación, dejándose de haber celebrado otra exaltación eucarística a cargo del Prendimiento, la Glorias de María en el Silencio, el de la juventud cofrade también del Prendimiento y dos exaltaciones, la saeta y la mariana por parte de la Agrupación. Mucho pregón para poco pregonero.

Tras compartir experiencias y criterios para construir la pieza del pregón, se debatió sobre lo inadecuado de algunos escenarios -iglesias en su mayoría- con notables carencias acústicas para la declamación, incomodidad o exceso de aforo para la escasez de cofrades, la falta de respeto a la figura del pregonero por un protocolo desfasado, anacrónico y redundante, presentaciones extensas, mantenedores innecesarios, discursos tras el acto para cerrar lo que el pregonero ya cerró con sus palabras, cuando no celebrar el acto tras un culto o con el añadido por delante la presentación de un cartel, un tres en uno que espanta a mas de un feligrés. 

De modo distendido y anecdótico se hizo repaso del arte kitsch con el que algunas hermandades premian el esfuerzo de meses de trabajo empleado en la redacción de cualquier pregón, groseras reproducciones de imágenes en material sintético, placas marmóreas mas propias para pisapapeles, diplomas a ordenador impresos en impresora de durabilidad efímera o cuadros de medidas desproporcionadas, alguien aseguró que a la primera ocasión que se le presenta va poco a poco desprendiéndose de este particular museo de los horrores.

Nada se sabe si este café de pregoneros tendrá continuidad o no, pero recomendamos a los que tengan el honor de pronunciar los de 2014 que se reúnan para ello, quizás sea su mejor momento como pregoneros, por cierto que los de este año prometieron firmemente no repertir próximamente, incluso alguno aseveró que jamás.